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La sirvienta Anita en su primer día de trabajo rehizo un montón de tareas y comenzó a colgar las cortinas lavadas. El propietario se despertó por la tarde y se dio una ducha, esperando que nadie lo molestara. Fue a la sala de estar, donde una encantadora belleza de cabello oscuro estaba sobre la mesa con un vestido corto. Anita vestía medias con ligueros, bragas finas transparentes, gtubexxx zapatos formales de tacón alto y traje de mucama, la chica saludó a la rubia, cuya mandíbula cayó y todas las palabras se le quedaron atoradas en algún lugar de su garganta. El chico miró con entusiasmo debajo del dobladillo del bebé, admirando su culo elástico y sus piernas afiladas a la perfección. Anita sintió como a través de finas medias el macho le tocaba el muslo con los labios, le metía la mano en la entrepierna, le comenzaba a acariciar el culo. Era una mujer inteligente que, además, no era reacia a tener sexo con un hombre rico y recibir un bono por sus servicios extra. El coño descendió con gracia sobre la mesa, separó los labios con la mano y tiró imperiosamente de la cabeza del semental lujurioso hasta la grieta que comenzó a rezumar de excitación. El fango chupador le hizo cunnilingus a Anita, le penetró el ano con una lengua sucia, metió los dedos en ambos agujeros y luego se folló a la desvergonzada institutriz con su rayo alemán.